
Donde William Borroughs charlaba con Paul Bowles y le escribía cartas a Allen Ginsberg, donde Mick Jagger le robaba la novia a Aute y componía canciones en la misma mesa de Jimmy Hendrix, donde esritores como Truman Capote tomaban té verde...
Está en Tanger... y te echo de menos allí.
Tienes alma de otra cosa, no sé qué haces en el Congreso.
ResponderEliminarEres una maravilla, ganarías en otras cosas pero bueno.
El alma (si existe) se va haciendo...poco a poco y ganas estes donde estes
ResponderEliminarParece muy bonito el sitio
Vete pidiendo un par de cañas! (Cuándo vamos!?)
ResponderEliminar